Hacerle frente a Colombia
- Sebastian Aguilar
- 13 nov 2019
- 2 Min. de lectura
El próximo 21 de noviembre se desarrollará en Colombia un paro nacional convocado por movimientos sociales, estudiantiles, laborales, políticos y sindicales de todo el país en contra de la administración del presidente Iván Duque (cargo en el que ha estado al frente durante más de un año).
Las motivaciones de la movilización están derivadas de las polémicas generalizadas durante los últimos meses en los cuales diferentes sectores de la sociedad han expresado su oposición a políticas, declaraciones, iniciativas y posturas que ha tomado el mandatario dentro y fuera del país.

Movilizaciones sociales | Foto de Revista Semana
Entre estos influyen temas económicos como la reducción de salarios mínimos a menores de 25 años (iniciativa que promovió el partido Centro Democrático exponiendo que dicha disminución fomentaría la creación de empleos). Las reformas pensional y tributaria que pretenden eliminar la pensión como derecho laboral y convertir a Colpensiones en un ente privado, y reducir los impuestos a multinacionales y grandes corporaciones, respectivamente.
En materia política ha influido el incumplimiento por parte del Estado en la implementación de los Acuerdos de Paz firmados con la guerrilla de las FARC en el 2016, y los altos índices de corrupción que han afectado los recursos públicos de los colombianos en la adjudicación y realización de proyectos de infraestructura como la Ruta del Sol.
Si bien las peticiones relacionadas no corresponden solamente a problemáticas generalizadas de esta administración, es pertinente mencionar que Iván Duque no ha dado respuesta ni ha prestado atención a las peticiones de la ciudadanía en torno a las mismas. Por esa razón, han aumentado los niveles de inconformidad y se busca a través del paro nacional que las voces de los colombianos sean escuchadas.

Iván Duque | Foto de El Espectador
Además, los medios de comunicación han tenido cabida en dicha problemática debido al rol pasivo que han tenido en el cubrimiento de movilizaciones anteriores, en el que no se han priorizado en las peticiones, sino en los efectos de orden público que han generado las mismas. Esto, sumado a que no se ha explicado a profundidad las causas de la inconformidad que se siente al interior de la ciudadanía y por el contrario se han mantenido espacios en los que se somete al espectador a una información superficial.
En mi opinión, considero importante participar de la movilización como un instrumento de apoyo para todos los grupos sociales que buscan que sus peticiones sean escuchadas. Además, creo que es pertinente ser parte de un llamado al Estado a prestar atención a los problemas internos y generar soluciones eficientes que respondan a las necesidades del país.
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